Según
Miguel de Unamuno, “la filosofía se acuesta más a la poesía que no a la
ciencia” (Del sentimiento trágico de la
vida, primeros párrafos). Yo creo que la buena filosofía se acuesta con las
dos por igual, porque una filosofía con poca ciencia tiende al verbalismo huero
y una filosofía con poca poesía tiende al almidonamiento. Puede, sí, el
pensador filosófico recostarse un día más hacia la poesía y otro día más hacia
la ciencia, pero no conviene que deje de lado ninguna de estas disciplinas por
un periodo demasiado prolongado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario